NOTA
DE PRENSA
En el día de hoy nos
enteramos por los medios que la Consejería de Educación quiere
modificar ciertos aspectos de la normativa de permanencia en listas
de interinidad, ignorando una vez más a nuestros legítimos
representantes elegidos democráticamente en unas elecciones
sindicales recientemente. Después de una legislatura en la que se
han negado sistemáticamente a cualquier acuerdo, imponiendo
unilateralmente sus propuestas, esta parece ser una medida
electoralista orientada a equivocar y a distraer a la opinión
pública, especialmente a aquellos compañeros que quieren entrar en
la función pública docente.
Desde nuestro punto de
vista es una medida más que va encaminada a dividir al colectivo de
interinos, muy activo e incómodo para el gobierno regional con
manifestaciones, huelgas, concentraciones, recogida de firmas,
reparto de folletos informativos, asambleas, entrevistas en la
radio...
Creemos que es una
medida fuera de plazo, de forma y de sentido, como las últimas
propuestas de la Consejería: la mal llamada, y posiblemente ilegal,
“continuidad pedagógica”, y la no menos polémica iniciativa de
los BIP. No estamos dispuestos a entrar en este juego cuando desde el
gobierno regional no se han tenido en cuenta jamás las propuestas
del colectivo para las negociaciones, ni siquiera las que llevaban
sus legítimos representantes sindicales. No se contempla la retirada
total y sin miramientos de la “continuidad pedagógica”, ni la
retirada de la penalización a aquellos compañeros que rechacen
jornadas parciales.
Creemos que si se va a
modificar la Orden que regula la interinidad docente en Cantabria,
tal y como parece deducirse, se debe tener en cuenta la opinión del
colectivo. Es una reforma que creemos necesaria, pero que no puede
hacerse desde el capricho y rompiendo con compromisos verbales que
tanto el Consejero como la Directora General de Centros realizaron en
su momento.
La verdadera apuesta
por la Educación Pública pasa por una bajada de las ratios, un
mayor número de profesorado en los centros trabajando a jornada
completa y unas ofertas de oposiciones dignas, acordes con la
realidad. Pasa por la no especulación con las aulas de 2 años, con
becas pagadas en tiempo y forma o con el aumento de los desdobles y
los refuerzos. También pasa por la reducción, y progresiva
eliminación, de los conciertos educativos a centros privados,
especialmente a aquellos que segregan por sexo. Finalmente, pasa por
una negociación y diálogo permanente con nuestros representantes
sindicales, con compromiso de acuerdo y no teniendo a la Educación
Pública como un negocio al que poder privatizar.
Santander, 18 de marzo de 2015.
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